Las azoteas verdes, los jardines y los árboles en las ciudades son grandes aliados para combatir esa subida de temperatura. Por eso, lejos de considerarse una mera tendencia o moda, la jardinería y huertos urbanos se están convirtiendo en una necesidad.
Para practicarla no siempre es necesario utilizar métodos sofisticados. Pero en ocasiones el diseño ayuda a instalar zonas verdes en rincones insospechados y de manera armoniosa, trepando por viejos muros, recuperando y llenando de vida los espacios abandonados para lograr, de vez en cuando, pasear en la ciudad por "caminos verdes" que disminuyan la contaminación acústica.
Las excusas para crear jardines entre el asfalto se acaban. Si las calles son estrechas y las plazas pequeñas, siempre habrá alguna idea creativa que solvente el problema de espacio. Como suele decirse, querer es poder. Tal vez todos esos diseños que se presentan a concursos, están más cerca de convertirse en realidad de lo que imaginamos. Ojalá sea así.
Las excusas para crear jardines entre el asfalto se acaban. Si las calles son estrechas y las plazas pequeñas, siempre habrá alguna idea creativa que solvente el problema de espacio. Como suele decirse, querer es poder. Tal vez todos esos diseños que se presentan a concursos, están más cerca de convertirse en realidad de lo que imaginamos. Ojalá sea así.
Aquí os muestro algunos ejemplos presentados por los estudios de Barreau y Charbonnet, con sede en París y Nantes, respectivamente, cuyos diseños buscan una conexión entre las plantas y las personas, aun dentro de una ciudad urbana de alta densidad demográfica.
Lo dicho, jardines y huertos cuidados, cercanos y cada vez más posibles.