Fue fundado, hace más de 50
años, con un enfoque visionario para la conservación. Un jardín botánico que se
inspira en el aprecio por las plantas nativas, teniendo en cuenta, no solo su
belleza y valor, sino también la necesidad de proteger los hábitats que las
sostienen.
"Quiero que éste sea un lugar donde la gente aprenda a apreciar nuestras plantas nativas y ver cómo estas plantas pueden enriquecer sus vidas para que, a su vez, se conviertan en conservadoras de nuestros hábitats naturales". Pamela Cunnigham (esposa de Lammot du Pont Copeland).
Jardín botánico
y reserva de la Naturaleza
Mt. Cuba Center es un jardín botánico y, reserva histórica de Naturaleza, cuya prioridad son las
plantas nativas y los ecosistemas. Funciona como institución sin ánimo de
lucro, y está incluido en el North American Plant Collections Consortium
(Consorcio de Colecciones de Plantas de América del Norte, formado por un grupo
de jardines botánicos y arboreto de Norteamérica con la intención de mejorar
las colecciones de plantas vivas del continente, así como mejorar las
disponibilidades de germoplasma de las plantas); y forma parte de ese consorcio
por ser el administrador de las colecciones nacionales de Hexastylis y de Trillium.
El código de identificación
del Mt. Cuba Center como miembro del "Botanic Gardens Conservation
Internacional" (BGCI), así como las siglas de su herbario es MCCSP.
Se sitúa en Greenville, cerca
de Wilmington, en una zona de suaves colinas en el Piedemonte de Delaware, en Estados
Unidos. Allí, Lammont Du Pont Copeland y
su esposa comenzaron a adquirir los terrenos en 1935, donde incorporaron una
casa colonial que terminó de construirse en 1937.
Inicialmente se crearon las
áreas formales del jardín. Entre 1965 y 1971 se fueron desarrollando los
jardines naturalistas de acuerdo al diseño de Seth Kelsey, que ofrecía un gran
despliegue de árboles, arbustos y flores silvestres nativas.
Después de la muerte de
Lammont Du Pont Copeland en 1983, su esposa, Pamela Cunnigham, continuó el
trabajo de su marido. Cuando la señora Copeland murió, en el 2001, el centro
continuó su actividad como una organización no lucrativa.
Colecciones de
plantas nativas
Uno de los valores de este
jardín botánico es que sus colecciones de plantas se centran en las plantas
nativas de los Bosques Templados de los Estados Unidos, con especial énfasis en
el Piamonte Apalache, un área que abarca nueve estados, desde Nueva York hasta
Alhabama. La colección está formada por más de 1.000 especies de plantas,
algunas de ellas amenazadas de extinción.
Muchas de esas plantas nativas
se cultivan a partir de semillas recolectadas en la naturaleza, que se propagan
en sus invernaderos y, posteriormente, se cultivan y exhiben en sus jardines.
Entre sus colecciones destacan las familias Asteraceae, Liliaceae, y los géneros Aster, Hydrangea,
Quercus, Trillium, Ilex, Phlox y Rhododendron.
El invernadero de Mt. Cuba
Center está involucrado, además, en numerosos estudios encaminados a determinar
cómo pueden propagarse aquellas plantas difíciles e, incluso, infrautilizadas,
con el objeto de que puedan ser restablecidas en el paisaje natural.
En su colección se incluyen también aquellas plantas no nativas que, sin embargo, tienen un valor especial por
formar parte de la historia y el legado de esa propiedad.
Jardines y terrenos naturales
Mt. Cuba destina más de 20 hectáreas a jardines de exhibición y más de 200 hectáreas son terrenos naturales.
Uno de los objetivos del
jardín botánico Mt. Cuba es preservar los pastos y campos rurales de la zona y
proteger los bosques locales. Sus
jardines arbolados producen algunas de las exhibiciones de flores silvestres más
espectaculares en la región del Atlántico medio.
El jardín formal,
recientemente rediseñado, lo forman fronteras mixtas inspiradas en los jardines
ingleses, e incluye solo especies de vivaces autóctonas cuidadosamente
seleccionadas para garantizar una buena presentación floral desde la primavera
hasta el otoño. Con ello han pretendido demostrar que es posible apreciar la
belleza y utilidad de las plantas nativas en un ajuste formal. Además, el uso
de plantas nativas favorece la biodiversidad en el jardín, convirtiéndolo en un centro de
actividad de polinizadores y mariposas.
El jardín
experimental
Es el plato fuerte de Mt. Cuba Center. En el jardín de ensayos se evalúan las plantas nativas y cultivares en relación a su valor hortícola y ecológico. Con ello se pone también en valor la utilidad de las plantas nativas para el ecosistema.
En el jardín experimental, las plantas se riegan según
sea necesario durante el primer año para conseguir que se establezcan, pero
después se mantienen solas. Los plaguicidas no se usan a menos que haya una
amenaza seria a la supervivencia de todo el ensayo.
Los ensayos de plantas
perennes suelen durar un período de tres años, con ello se aseguran de que las
plantas han experimentado diferentes condiciones climáticas. Solo reemplazan
las plantas muertas después del primer invierno, para compensar el mal
establecimiento o la calidad inicial de la planta. Sin embargo, no se realizan
reemplazos durante los años subsiguientes.
Cada taxón se evalúa semanalmente y
se le asigna una calificación basada en una escala de 1-5, siendo el 1 la
calificación más pobre y el 5 la excelente. Esta clasificación toma en cuenta
muchos factores incluyendo el hábito, la exhibición floral, la resistencia a enfermedades, la rusticicidad, y la calidad del follaje. El promedio de estas
calificaciones semanales se utiliza para calcular la puntuación final que
después muestran en su sitio web.
Y entre una cosa y otra, nos
hemos dado un buen paseo por Delaware. Ahora solo falta echar un vistazo a las
imágenes para comprobar cómo son de bellas esas plantas nativas de las que,
además, se obtienen interesantes cultivares que las mejoran. No hay que perderse algunas especies de la familia Asteraceae, muchas de esas llamadas Daisy y que en ese entorno presentan su mejor cara...
Las
fotos son todas de Mt. Cuba Center y tenéis más información en su sitio web. No
tiene desperdicio.